Bienvenidos a mi libreto de poemas medidos y desmedidos... y etéreos

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jueves, 31 de enero de 2013

Falso dios

A ciegas, te adoré. 
'Los falsos ídolos', de Alan Falk
Y te ofrendé mis versos de presentes, 
sacrifiqué mi sangre ante tu altar,
y agasajé tu nombre con collares cobaltos. 
Mas recé
               canté 
                          y baïlé 
tu agua bendita falsa
que en la frente me ungías. 
Pero no. No eres digno de morar en mi casa. 
No. Ya ni tus palabras 
me bastan. 
                  Que ya no. 
No eres mi credo, 
                            ni eres mi religión. 
Si desde tu alto trono te creíste dios 
                                                      -juez, 
parte de mis andanzas-, 
                                       ya grito:
a dios muerto
(acabada la rabia)
                       atea me declaro sin clemencia. 

2 comentarios:

  1. Amiga, este estado poético que te fluye por las venas es verdaderamente bueno.Habrá que inscribir como nueva generación tu poesía.
    Muy muy bueno.
    Pensamientos de un principiante que te sigue....

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  2. Me apunto a ese sentir tuyo. Quién es ese Dios que nos anunciaron como salvador y redentor? Dónde está ahora que el mundo está sumido en la barbarie? Hace tiempo que corté esas cadenas. Por cierto veo un cambio en tus letras a mejor

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